El arte es más sublime cuando vuelve a los orígenes, y se inspira, se hace grande a base de pequeñas cosas que componen un mosaico como diría el gran Gaudí y al final es un arte vital, que transmite lo que siente, no se abandona a lo fácil y llamativo que nunca permanece. Pues es la búsqueda de la belleza lo que hace al arte que sea arte, pues aunque efímero es muy esencial para transmitir nuestro espíritu, la esencia de lo eterno para llamar a las conciencias, para saborear el tiempo de la iluminación...
Un ejemplo nos lo da en retazos la obra gaudiana, que como un río de la naturaleza fluye en una corriente contínua, que da una inmensa alegría, que te lleva al éxtasis de contemplar al fin tanta belleza de lo cotidiano para llegar al fin a conocer mejor y conocernos. Es el gran don divino de lo creado y la creatura que recrea lo creado, que responde con piedrecitas de colores a lo que es un mosaico trenzado por el Hacedor.
Gaudí tenía sabiduría porque comprendió al fin que la belleza es el resplandor de la Verdad, que la luz es Gloria, que el trabajo es Don... "el arte debe volver a los orígenes" manifestaba por entonces.
Consideremos por un instante que el pensamiento es Arte, como diría Leonardo es "cosa mental" que idea sobre la idea original: sobre el mito y el logos, sobre la pasión y el amor, sobre el gobierno de las cosas y la paz del alma...
Que poco sabemos cuando no indagamos lo que vemos y nos quedamos mirando ante el espejo del agua sin profundizar mar adentro.
La belleza es curiosidad, ternura por lo humano, manifestación de gracia, la palabra definitiva que lo explica todo.
Como botón de muestra nos recreamos con la fotografía de Charles Fillhardt un homenaje magnífico a la obra del catalán universal de Reus a manera de mosaico.
Y un apunte final: Me apetece ver este vídeo de un mosaico hecho con agua y 66.000 vasos, quizá lo conoces o quizá no lo has visto. Mira despacio y aprende...
